Yamaha Niken 2019

Yamaha presentó en el Salón de Tokio 2015 un prototipo que dejó a todo el mundo impresionado. Se trataba de una moto de tres ruedas, dos delanteras y una trasera. Una moto futurista y con, aparentemente, escasas posibilidades de llevarse a la producción en serie debido a lo rompedor del diseño.

En 2017 saltaba la sorpresa en el Salón Internacional de Milán: Yamaha presentaba oficialmente la Niken, una apuesta muy arriesgada y que generó un debate muy intenso entre todos los motoristas del mundo. Por un lado estaban los más pragmáticos o conservadores, que veían una moto con un tren delantero muy pesado y que únicamente buscaba impresionar, pero que jamás sería realmente efectiva en carretera. Por otro lado estaban los más entusiastas, los que defendían las posibles bondades de un sistema que jamás se había probado en una moto grande; las dos ruedas delanteras deberían dar una seguridad y un aplomo nunca vistos en una moto de serie. Entre estas dos corrientes estamos otro grupo a los que poco nos importa si es muy efectiva la solución técnica; queremos aire fresco, novedades… somos amantes de otros modelos anteriores de escaso éxito comercial, pero que se convirtieron en leyendas por sus innovaciones técnicas. Sirva como ejemplo la Yamaha GTS 1000 con chasis “Omega”, inspirada en la Britten V1000, o las Honda NR750 o Bimota Tesi 3D.

Finalmente a mediados de 2019 llegaban las primeras Yamaha Niken a los concesionarios oficiales de la marca de todo el mundo. Hemos tenido el privilegio, gracias a nuestros amigos de Yamaha Motor Madrid, de probar una de estas unidades durante 10 días para Póker Live Club Magazine, tiempo más que suficiente para acostumbrarnos a las peculiaridades de una moto muy diferente a los modelos que estamos acostumbrados a pilotar y sacarle todo el jugo posible.

Lo primero que nos sorprende nada más verla es la envergadura de su parte frontal, que nos recuerda más a un Transformer que a una moto ¡parece que en cualquier momento se va a levantar y a ponerse a hablar! Habrá defensores y detractores en el aspecto estético de la Yamaha Niken, pero lo que os podemos asegurar es que no va a dejar a nadie indiferente. Nos subimos y encontramos una postura de conducción completamente natural. Al poner el contacto nos llevamos un pequeño chasco, pues una moto de este nivel creemos que debería venir equipada con una pantalla TFT;  su cuadro es una pantalla LCD sin mucha gracia, pero con toda la información necesaria. Encontramos multitud de mandos en el manillar y en cuadro. Vemos que podemos elegir dos niveles de control de tracción o incluso desconectarlo si es que tenemos un día inspirado; igualmente vemos que disponemos de tres modos de conducción, uno de ellos específico para días lluviosos o con el asfalto delicado. Hay un botón que nos alegra ver, es el control de crucero, que nos ayudara a devorar kilómetros con la mano derecha más relajada. La Niken cuenta además con embrague antirrebote A&S y con cambio rápido QSS, lo que hará que podamos ir rápido sin demasiadas preocupaciones.

 Pero bueno, vamos a lo que importa…ponemos contacto, metemos primera y nos ponemos en marcha. ¡Sorpresa! la moto no se muestra nada torpe ni “cabezona” como podríamos esperar. Parece que vamos montados en una moto convencional.

Empezamos a abrir gas con algo de tacto a pesar de que el motor ya lo conocemos de la MT09 y sabemos de sus bondades. Desarrolla 115Cv y más importante aún 85Nm de par motor, que nos van a permitir equivocarnos de marcha y aun así mantener el empuje necesario para trazar cualquier curva con seguridad y salir con fuerza de la misma. El cambio rápido nos permite ir enlazando marchas sin esfuerzo. Las primeras curvas nos dejan una extraña sensación de “podría haber apurado más” que vamos a intentar resolver con el paso de las horas. A pesar de que el enfoque de esta moto es más touring que sport, la Niken nos invita a ir muy alegres entre curvas, ya que nos permite enlazarlas con una sensación de seguridad absoluta que jamás habíamos tenido. Esta Yamaha soluciona de un plumazo la falta de confianza que por lo general sentimos en las frenadas y en los apoyos en la ruda delantera. El funcionamiento del tren delantero es sencillamente excepcional. Cuando viajamos a velocidades de crucero elevadas la moto se muestra completamente estable, lo que unido a la posición de conducción perfectamente estudiada hace que podamos realizar tiradas de más de 300 kilómetros sin apenas cansancio. El consumo (5,5l/100km) es contenido para una moto de este peso (267 Kg) y potencia. La conducción una vez lanzados es similar a la de una moto convencional, si bien notamos que podemos tumbar algo más de lo normal y sobre todo que no tenemos esa sensación de “peligro” constante de perder la rueda delantera. Nos hemos encontrado curvas húmedas o con algo de suciedad y hemos pasado por ellas con sensación de seguridad total.

La marca nos ofrece además multitud de accesorios originales para hace la moto a nuestro gusto. Disponemos en el catálogo de accesorios destinados al uso touring de la moto como el parabrisas alto, el asiento confort (el que trae de origen ya es bastante cómodo), parrilla porta equipajes trasera, maletas lateras de 25 litros de capacidad, puños calefactables, toma de corriente de 12V (viene con una de serie), o caballete central.

En definitiva nos encontramos con una de esas motos exclusivas y diferentes que aparecen cada cierto tiempo, pero en este caso podemos afirmar rotundamente que funciona a las mil maravillas. Es cierto que echamos de menos en una moto de 16.500€ la llave inteligente, el cuadro de mandos con pantalla TFT, el parabrisas regulable en altura eléctrico o el caballete central de serie…pero también es cierto que con este presupuesto no encontraras una moto tan exclusiva como esta en el mercado.

En nuestra opinión es una moto 100% recomendable.

Autor: Jun A. Longton